Una larga tradición
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De generación en generaciónStubbe-Flandria nace en 2016 tras la fusión de dos tabacaleras belgas con una larga historia familiar en la industria del tabaco. Los orígenes de la tabacalera Stubbe se remontan a 1943 en la localidad de Zonnebeke, en Flandes Occidental. Por su parte, Flandria Tobaccos se fundó en 1939 en Kruisem, en Flandes Oriental.
Unidas por la pasión por el oficio y el respeto por la tradición artesanal, ambas empresas han trabajado incansablemente para construir una historia de éxito nacional. Siempre comprometidas con la calidad, la innovación y la automatización, han sabido abrirse camino en el mercado de la exportación y sentar las bases de una estrategia internacional.
Con una segunda generación fuerte, que ha hecho prosperar el negocio, Stubbe y Flandria son de las pocas tabacaleras artesanales belgas que han podido consolidar su posición en el mercado entre las multinacionales. Al mismo tiempo, ambas han demostrado complementarse a la perfección en lo que respecta al acabado, segmento de mercado y estrategia. Por todo ello, era lógico que Stubbe y Flandria unieran fuerzas en 2016 para crear Stubbe-Flandria bajo el liderazgo de la tercera generación de la familia Stubbe. |
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